Connect with us

DESTACADA

Nuestros días son contados en este mundo…

Publicado

el

«Dios mío, hazme saber cuál será mi fin, y cuánto tiempo me queda de vida; hazme saber cuán corta es mi vida”. – Salmos 39:4

En días recientes, el mundo se enteró del fallecimiento de la reina Isabel II del Reino Unido, a la edad de 95 años. Dentro de los datos curiosos que surgen después de su muerte es, que fue la reina más longeva en su reinado, el cual duró 70 años.

A pesar que la pareja real, Isabel II y el príncipe Felipe de Edimburgo, quien falleció en el 2021 a días de cumplir 100 años, siendo una de las familias más reconocidas a nivel mundial, aún, perteneciendo a la realeza, sus días sobre la tierra estuvieron contados como a cualquier otro ser humano.

El salmista, en el versículo de hoy le manifiesta a Dios el deseo de saber cuál será su fin de sus días: «Dios mío, hazme saber cuál será mi fin, y cuánto tiempo me queda de vida; hazme saber cuán corta es mi vida”. – Salmos 39:4

Le planteo la siguiente pregunta, ¿Qué haría usted si supiera cuando va a fallecer y en qué condiciones? ¿Alguna vez vio la película “Volver al futuro” ?, en esta película, el joven Marty McFly viaja accidentalmente al pasado en un vehículo modificado por un científico, el científico le dice al joven que no puede alterar nada en el pasado porque afectaría el presente de donde el viaja. En otra, de la misma serie, el joven viaja al futuro y se mira así mismo.

Tengo la seguridad que si usted y yo supiéramos cuando será el fin de nuestras vidas, hoy haríamos cambios importantes que afectarían nuestra condición en el futuro. El propósito de Dios con el hombre, no es que tuviera los días contados en esta tierra, pero el pecado alteró los planes de Dios, pero, aún con todo eso, ya había un plan de salvación para el hombre.

Nosotros no podemos viajar al pasado, mucho menos al futuro, lo más importante y valioso que tenemos es nuestro presente y la palabra de Dios que habla de un futuro con esperanza; todas las decisiones que tomemos hoy, sin duda alguna, tendrán una repercusión en el futuro, el estilo que vida que adoptemos hoy nos dará una mejor condición de vida en la vejez.

En Mateo 6:25-34, Jesús nos dice que no nos preocupemos por nuestra vida, que comeremos o vestiremos el día mañana, que, si buscamos el reino de Dios cada día, y lo ponemos en primer lugar, el nos dará todo lo que nos falte, que cada día trae su propio afán.

Sea cual fuere el final de nuestros días, y aún cuando no lo sepamos cuando será, vivamos preparándonos cada día como si fuese el último, encomendando a Dios nuestra vida, haciendo todo lo que a él le agrada, teniéndole en primer lugar en todo, sus promesas son ciertas y verdaderas, y aun en la vejez, no dejará desamparado al justo.

No es tarde, todavía está a tiempo de cambiar el rumbo de su vida, mientras haya vida, hay esperanza, y si la vida que lleva hoy no es considerada como el mejor ejemplo, en Cristo hay poder para transformarla, y que el día de mañana usted mire a su pasado y vea que lo Dios ha hecho en su vida, que es posible alterar el rumbo del futuro que no conocemos, haciendo cambios para bien en el presente que Dios nos regala.

Vivamos cada día como lo expresa el apóstol Pablo en Filipenses 1:21

“Para mi el vivir es Cristo, y el morir es ganancia”.

Dios te bendiga.


Autor: Jeser Alejandro

 

Sigue leyendo

DESTACADA

El jardín de tu mente

Publicada

el

La mente es un jardín, y nuestros pensamientos son las semillas que sembramos en él. Si plantamos semillas de amor, compasión y autoaceptación, crecerá una hermosa flor de paz y serenidad. Pero si sembramos semillas de autocrítica, miedo y duda, crecerá una maleza de ansiedad y tristeza.

Cuida tu jardín mental con gentileza y compasión. Riega tus pensamientos con positividad y esperanza. Y recuerda que, al igual que un jardín necesita sol y lluvia, tú necesitas autocuidado y amor propio para florecer.

No te rindas si encuentras malezas en tu camino. Con suavidad y paciencia, arráncalas y vuelve a sembrar semillas de amor y luz. Tu mente es un jardín precioso, y merece ser cultivado con amor y cuidado.


«Cuida tu mente más que nada en el mundo, porque ella es fuente de vida».

Proverbios 4:23 DHH

Sigue leyendo

DESTACADA

Cuéntale a Dios tus problemas, solo el puede darte la mejor solución.

Publicada

el

Vendrán orando y llorando. Yo los llevaré a corrientes de agua, por un camino llano, donde no tropiecen. Pues soy el padre de Israel… —Jeremías 31:9 (DHH)

En una charla sobre cómo superar los problemas. El orador comenzó contando un chiste muy gracioso. Por supuesto, todos los presentes rieron a carcajadas.

Después de unos segundos de pausa, el orador volvió a contar el mismo chiste, exactamente de la misma manera que la vez anterior. Algunos espectadores volvieron a reír, pero la mayoría solo sonrió levemente.

Luego, volvió a repetir el chiste por tercera ocasión. Esta vez no se escuchó ninguna risa.

Después de una pausa silenciosa e incómoda, el orador le dice a los presentes:

—Nadie puede reír de la misma broma una y otra vez. Entonces, ¿por qué lloramos una y otra vez por el mismo problema?

Cuando el pecado entró en el mundo se desencadenaron un sinfín de problemas como consecuencia, y desde entonces, el hombre ha derramado lágrimas en cada ocasión que ha sido necesario.

Estando en un funeral observaba a los familiares y amigos del fallecido y algo interesante que notaba es que, quienes confían en las promesas de Dios encuentran el consuelo en ellas y se les mira más tranquilos, sabiendo que Dios tiene el control de todo y que hay un propósito detrás de todo, no digo que no lloren por la tristeza, pero, en funerales donde están personas que no hacen suyas estas promesas en dolor y el llanto es más doloroso.

Antes las dificultades y adversidades en la vida, no te desesperes, aprende a confiar en Dios como quien confía en un buen amigo. Aunque no lo veamos, Dios siempre está a nuestro lado. El salmista dice:

“Cercano está el SEÑOR a los quebrantados de corazón, y salva a los abatidos de espíritu”. – Salmo 34:18

Que si se preocupa Dios por tus problemas, por supuesto que sí, el apóstol Pedro dice:

“Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros”. 1 Pedro 5:7.

El sufrimiento no será para siempre, Dios nos ha prometido un cielo nuevo y una tierra nueva, donde no habrá más llanto ni dolor, porque todas las cosas viejas habrán pasado. Te recomiendo que leas Apocalipsis capítulo 21.

Dios te bendiga y que a partir de hoy sea tu compañero en todo momento, que encomiendes a Él todos tus caminos y nunca más sentirás que estas sola o solo.

Sigue leyendo

Trending